EDITORIAL
El 6 de octubre fue promulgada la Ley 20.958 de Aportes al Espacio Público, que establece nuevas responsabilidades e instrumentos para que los proyectos inmobiliarios realicen mitigaciones de su impacto de transporte y aportes para el mejoramiento de espacio público de las comunas en las cuales se emplazan.
Esta ley busca que el proceso de identificación de impactos de transporte y su mitigación se realice de forma más expedita y transparente en comparación con el sistema actual de los Estudios de Impacto Sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU). Entre otros cambios sustantivos está la creación de un registro de consultores habilitados para desarrollar los estudios de impacto y la consideración de todos los usuarios del espacio público y no solamente los usuarios motorizados.
La ley debe ser acompañada por un reglamento que será definido en los próximos meses y en él se establecerán los requerimientos específicos de los nuevos estudios de impacto, que ahora se denominarán Informes de Mitigación de Impacto Vial. El nuevo sistema comenzará a funcionar 18 meses después que se publique el reglamento.
Mauro Huenupi
Editor