El pasado 27 de agosto se desarrolló el diálogo ciudadano en el Gran Concepción, en el marco del Comisión Pro Movilidad Urbana (CPMU). La actividad tuvo lugar en el salón mural de la Intendencia, otrora hall central de la estación central de ferrocarriles de la ciudad de Concepción
Después dela bienvenida de la autoridad política, siguió una presentación del presidente de la Comisión y del Seremi de la cartera convocante. Luego vino una pausa café y a trabajar.
Se formaron grupos de trabajo al azar, o al menos esa fue la intención, con 10 personas cada uno más o menos. Colores distinguían a los diferentes grupos. Monitores capacitados hacían de facilitadores en cada grupo, guiando la conversación, que en algunos instantes caía en catarsis colectiva, intentando dar respuesta a las tres preguntas: ¿Por qué es relevante disminuir la congestión? ¿Qué causa la congestión? ¿Cómo resuelvo la congestión?
Luego de hora y media de trabajo cada grupo expuso sus respuestas ante el plenario, para terminar con unas palabras de cierre del presidente de la comisión. Sendos certificados refrendaban la participación de los ciudadanos.
Este ejercicio colectivo, donde había representantes de juntas de vecinos, dueñas y dueños de casas, personas con movilidad reducida, además de profesionales de variada índole, mostró que hay diferentes líneas de acción en esto de mejorar los desplazamientos en las áreas urbanas y su territorio adyacente. Hay que destacar que si bien los participantes estaban convocados a hablar acerca de la congestión, expresaban sus opiniones acerca de lo problemático de sus desplazamientos, que en algunos casos se debía a la congestión. Las respuestas abarcaron temas desde la inmediatez y lo operativo, hasta lo táctico y estratégico.
Se mencionaron los siguientes aspectos que afectan los desplazamientos, que en sí no es una lista exhaustiva: buses que no respetan los paraderos y que no usan las bahías disponibles, automóviles privados que utilizan las vías y corredores exclusivos obstruyendo el paso de los buses que operan en ellas, no detención en paraderos o detención excesiva, a la espera de pasajeros que no hay, taxis colectivos “piratas”, bicicletas en las veredas, falta de respecto a la señalización en cuanto a velocidad máxima y preferencia a peatones, y veredas en mal estado que son fuente de accidente para peatones.
En una escala distinta se señalaron los siguientes problemas: buses con diseños interiores que no permiten el acceso a personas con problemas de movilidad, buses cuyo tamaño no se condice con el número de pasajeros que transportan en los períodos de mayor demanda, recorridos de líneas de transporte público que no abarcan todo el territorio urbano, falta de integración tarifaria entre los buses y el tren, exceso de automóviles y estacionamientos en la calle, y operación del transporte limitada en horas de la noche.
Y por último, ya a una escala mayor, se citaron los siguientes factores como causantes de una movilidad poco eficiente: falta de oferta de equipamiento que obliga a desplazarse a otros lugares de la ciudad para realizar trámites o satisfacer algunas necesidades, y falta de planificación integrada entre el transporte y el crecimiento de la ciudad.
Sospecho que los factores indicados antes por los ciudadanos del Gran Concepción han aparecido y aparecerán en las otras ciudades donde se está realizando este ejercicio de participación, aunque el tamaño de la ciudad hace que la relevancia de los diferentes factores sea distinta. Si bien para algunos profesionales no habrá nada nuevo bajo el sol, dejando que las cosas sigan pasando ante sus narices, no ocurre lo mismo con los ciudadanos, cuya calidad de vida está empeorando producto de la mala calidad de sus desplazamientos, derivado de decisiones que tienden a favorecer implícita o explícitamente a ciertos modos, que resultan ser los menos efectivos y eficientes en términos ambientales, sociales y económicos.
Al escuchar los comentarios en la sesión plenaria, me he acordado de algunas caricaturas disponibles en la red que reflejan en cierta medida cómo nos va en la ciudad, particularmente cuando pensamos que el problema lo causan los otros y cuando hay soluciones que, más que aportar a resolver los problemas, los agravan:
Aún hay tiempo para participar en estos diálogos, bastando inscribirse, asistir e involucrarse con los otros. ¡No hace daño! Espero que este proceso permita a la autoridad tomar acciones inmediatas en aquellos aspectos que en sí constituyen problemas de fiscalización y gestión. Ya habrá espacio para estudios más profundos en problemas y posibles soluciones que así lo ameriten.
Más antecedentes para participar, acá:
http://www.subtrans.gob.cl/inscripcion-dialogos-ciudadanos.html