por Alejandro Schmidt Garín. Gerente de Sistemas Inteligentes de Transporte. Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM)
Un desafío compartido de todas las grandes urbes es incentivar el uso del transporte público. Lamentablemente, tras la pandemia se observa un aumento considerable en el uso del vehículo particular alrededor del mundo, lo que se traduce en que la recuperación de los niveles de demanda previos al 2020 ha sido desafiante y compleja. Santiago no ha sido la excepción, pero ha apostado fuerte por la innovación en el transporte público como un factor de clave para incentivar su uso, haciéndolo más atractivo y accesible.
Desde inicios de 2022, cualquier persona que tenga un teléfono inteligente puede utilizarlo como medio de pago, debido a la habilitación de la posibilidad de validar la tarifa a través de códigos de barras bidimensionales, ofreciendo una experiencia digital que permite prescindir de una tarjeta física.
Desde la fecha de lanzamiento, se ha habilitado la posibilidad de pago mediante códigos QR en distintas aplicaciones, entre las que se encuentran la aplicación oficial de Red Movilidad, BancoEstado, MercadoPago y MetroQR. En su conjunto, son más de 3 millones de personas que tienen disponible su cuenta digital para pagar sus tarifas en Red Movilidad.
En este contexto de modernización del sistema, y aprovechando las potencialidades de la tecnología de ticketing basado en cuentas (ABT) para mejorar la experiencia de pago de la ciudadanía, es que se implementó una inédita política pública en nuestro país, esta es, el incentivo tarifario Dale QR. Este beneficio acota el gasto mensual en transporte público a $39.000 como máximo para aquellas personas que paguen su tarifa mediante el ecosistema de pagos QR.
Este “cap mensual”, similar a lo habilitado actualmente en ciudades como Londres, Nueva York, Los Angeles o Dublín, tiene la ventaja de que no requiere a las personas decidir previamente sobre un producto tarifario ni depender de altos niveles de liquidez al inicio de cada mes, sino que asigna a quienes viajan en Red Movilidad la tarifa más conveniente de acuerdo a su patrón de viajes.
Desde entonces, el ecosistema de pago mediante QR ha consolidado sus indicadores de crecimiento, alcanzando un 25% del total de pagos de tarifa adulto (actualmente no está disponible para el pago de tarifas reducidas). Es decir, una de cada cuatro personas que
viaja en nuestro sistema prefiere pagar su viaje con tecnologías digitales. En términos absolutos, ya son más de 1 millón de personas las que mensualmente deciden pagar con QR.
Con el lanzamiento de Dale QR, son más de 80.000 personas las que se han visto beneficiadas, pudiendo realizar viajes de manera gratuita en el sistema. Esta medida funciona virtuosamente en varios sentidos. Por un lado, no castiga con un costo mensual tan elevado a aquellos usuarios más frecuentes del transporte público, entregando un beneficio que sin duda genera una diferencia en el bolsillo de muchas familias. Por otro, es esperable que, junto a un mejoramiento general del sistema – recambio de flota, buses más modernos y cómodos, entre otras medidas- el DaleQR incentive el uso del transporte público y el pago de tarifa.
En suma, en muchas ciudades del mundo se ofrecen alternativas innovadoras dentro del transporte público. En algunas se ofrecen pases mensuales, semanales y diarios, que han demostrado ser un producto tarifario valorado por la población ya que permite acotar el gasto en movilización. En otras, se permite el pago con tarjeta de crédito. En Santiago, además de permitir el uso de tres modos (metro, tren y bus) con una sola validación, hoy se puede viajar con la seguridad de que existe un monto máximo mensual de gasto en transporte público.
La implementación de políticas públicas innovadoras y de alto impacto social, como la habilitación de DaleQR, se enmarcan en un proceso transversal de modernización tecnológica que el Directorio de Transporte Público Metropolitano está impulsando, mediante el cual se proyecta consolidar la posición de liderazgo del Sistema Red Movilidad en la región. Este proceso, denominado Transformación Tecnológica, contempla la contratación de un nuevo sistema de gestión de flota, la habilitación del pago mediante tarjetas bancarias, ¡la renovación de la tarjeta bip! y la implementación de la gobernanza de datos de Red Movilidad, solo por mencionar algunos. Además de estar constantemente explorando buenas ideas para traer a Chile, Red Movilidad también es un referente internacional que es un ejemplo en la implementación de modelos de contratación, soluciones tecnológicas, movilidad sostenible y perspectiva de género. Esto debe llenarnos de orgullo, pero, sobre todo, es un llamado a no tener miedo a la innovación, pues es una herramienta clave para aumentar la demanda y satisfacción de nuestros usuarios y usuarias.
La invitación es a participar activamente desde cada área, sea la academia, consultoria, industria o cualquier ámbito del transporte, con ideas que lleven al sistema a dar un paso más en su modernización. Como Directorio generamos los canales y recogemos esa activa participación para continuar promoviendo los avances del sistema.